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    La Operación Reinhard y la cremación masiva: diseño de las parrillas crematorias

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    Tanto sobrevivientes judíos como perpetradores nazis han descrito las parrillas crematorias utilizadas en los campos de la muerte de la Operación Reinhard¿Cómo sabemos que estas parrillas habrían funcionado?

    Los negacionistas del Holocausto argumentan lo siguiente:

    Las parrillas crematorias en los campos de la muerte de la Operación Reinhard en Treblinka, Sobibor y Belzec tenían un diseño defectuoso y no hubieran funcionado.

    Los hechos son:

    Los testimonios de los mismos nazis indican que construyeron parrillas a partir de bloques de hormigón y rieles ferroviarios de acero. Se colocaban sobre un pozo lleno de leña embebida de gasolina o combustible. Este sistema para cremar los restos de sus víctimas era primitivo, pero efectivo.

    ¿Cuáles son las afirmaciones específicas de los negacionistas del Holocausto sobre las parrillas crematorias?

    Para “entender mejor el proceso de cremación al aire libre”, un negacionista estadounidense del Holocausto y creador de videos de YouTube, bajo el pseudónimo de “Denierbud” (“el amigo negacionista” en inglés), llevó a cabo un experimento que buscaba imitar las parrillas crematorias de la Operación Reinhard. Hizo una hoguera en una playa y le apoyó encima una parrilla sobre bloques de hormigón. Luego, cremó una sola pierna de cordero de 5,7 kg (12,5 lb) sobre la parrilla. Cuidó el fuego durante horas, agregando madera en intervalos regulares. En última instancia, Denierbud decidió que el experimento fue un fracaso. La pierna de cordero no fue reducida a cenizas. En función del experimento, concluyó que “los alemanes no lo habrían hecho de esta manera”.Considera que “por lo menos, habrían implementado la tecnología medieval de una parrilla de altura regulable”[1].

    La construcción de las parrillas crematorias:

    No hay sobrevivientes judíos ni de Belzec ni de Sobibor que hayan trabajado en el área de exterminio e incinerado los cadáveres. Sí hay dos sobrevivientes de Treblinka —Yankiel Wiernik y Chil Rajchman (también conocido como Henryk Reichman)— que sí trabajaron en el área y pudieron describir de forma directa las parrillas crematorias. Ambos expusieron el terrible proceso de la cremación en general, pero no brindaron detalles sobre la construcción de las parrillas. No obstante, los perpetradores de las SS sí caracterizaron las parrillas crematorias en diversos juicios por crímenes de guerra.

    Heinrich Matthes, comandante del área de exterminio en Treblinka, declaró en el primer juicio por Treblinka en Düsseldorf, Alemania (1964): “… se colocaban juntos bloques de hormigón y vías ferroviarias. Los cadáveres se apilaban encima de estos rieles. Se ponía maleza por debajo. Se empapaba la madera de combustible. Así, se cremaban no solo los cadáveres nuevos, sino también los exhumados de las tumbas”.[2]

    Pavel Leleko, un guardia ucraniano en Treblinka, también describió la parrilla:“Tenía la forma de un pozo de cemento de alrededor de un metro de profundidad y veinte metros de longitud. Por toda la longitud de una de las paredes, había una serie de hornos cubiertos con cuatro filas de rieles. Los cuerpos se colocaban sobre los rieles; las llamas de los hornos los prendían fuego, y se quemaban”.[3]

    Karl Streibel, quien visitó Sobibor hacia finales de 1942, dijo que el “tostador hecho de las vías ferroviarias se apoyaba sobre una base de piedra”.[4]

    Por lo tanto, se puede decir que generalmente las parrillas crematorias se construían sobre un pozo o dentro de este. Los rieles ferroviarios se apoyaban sobre bloques de hormigón a lo largo del pozo. La leña se colocaba debajo de la parrilla y se embebía con gasolina o combustible.[5]

    Si las parrillas crematorias eran tan ineficientes, ¿por qué funcionaron tan bien en Dresden?

    En febrero de 1945, tras el ataque aéreo de los Aliados en Dresden, Alemania, se cremaron 6,865 restos en la plaza central, Altmarkt[6]. David Irving, a quien el Tribunal Superior de Londres declaró negacionista del Holocausto, racista y antisemita, describe el diseño de la parrilla y el proceso de cremación en su libro de 1963 sobre el ataque aéreo a Dresden: “Se habían levantado con un cabrestante las vigas de acero de las ruinas del centro comercial Renner en Altmarkt y colocado toscamente de forma perpendicular sobre toscas pilas de bloques de arenisca. Se estaba erigiendo una parrilla gigantesca de más de seis metros (veinte pies) de largo. Bajo las vigas y barras de acero, se metían fajos de madera y paja. Por encima de la parrilla, se iban amontonando los cadáveres, de cuatrocientos a quinientos por vez, con más paja entre cada capa… Por último, litros de gasolina… se vertían sobre las pilas de víctimas. Un oficial superior despejó la plaza Altmarkt de todos los espectadores innecesarios, prendió un fósforo y lo echó al cúmulo. Una vez más, un espeso humo negro ascendió desde el centro de la plaza Altmarkt de Dresden”.[7]

    Es imprudente depender exclusivamente de las palabras de David Irving. No obstante, Frederick Taylor, autor de Dresden: Tuesday, February 13, 1945 (2004), ofrece un informe responsable del ataque aéreo a Dresden. Confirma el relato de Irving en cuanto al diseño de la parrilla y al proceso. Concluye que la “tarea se completó con eficiencia”.[8]

    Por lo tanto, de acuerdo con Taylor y con Irving, los restos se redujeron a cenizas y fragmentos óseos usando un método casi idéntico al de las parrillas crematorias en los campos de la muerte de la Operación Reinhard.

    ¿Parrillas “medievales” de altura regulable?

    Denierbud afirma que el proceso de cremación que se propone que se usó en los campos era tan primitivo que hasta las personas del Medioevo —quienes, según él, usaban parrillas de “altura regulable”— habrían sabido cómo incinerar miles de cadáveres con mayor eficiencia. Sin embargo, no ofrece prueba alguna de cómo se habría visto esta parrilla de “altura regulable”, cómo habría funcionado o, siquiera, si se usó alguna vez una parrilla de este tipo. Las especulaciones de Denierbud sobre el uso de parrillas de “altura regulable” en el Medioevo no tienen valor alguno como evidencia.

    Conclusión:

    Los testimonios de los mismos alemanes indican que construyeron parrillas de altura fija a partir de bloques de hormigón y rieles ferroviarios de acero. Estas se colocaban sobre un pozo lleno de leña embebida con gasolina o combustible. Este sistema para cremar los restos de sus víctimas era primitivo, pero efectivo.

    Monumento de piedra en el campo de exterminio de Treblinka semejante al pozo crematorio original. De Adrian Grycuk/usuario: Boston9, recorte del usuario: Poeticbent [CC BY-SA 3.0 pl (http://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0/pl/deed.en)], a través de Wikimedia Commons

    NOTAS

    [1] Véase “One Third of the Holocaust” en http://www.youtube.com/watch?v=taIaG8b2u8I, aproximadamente entre los 3:03:00 y 3:05:00.

    [2] Yitzhak Arad, Belzec, Sobibor, Treblinka: The Operation Reinhard Death Camps (Indiana University Press, 1987), p. 174, que cita a Treblinka-Franz, Banda 10, p. 2057.

    [3] “The Interrogation of Pavel Vladimirovich Leleko”, los Protocolos Soviéticos, 20 de febrero de 1945 en http://www.nizkor.org/hweb/people/l/leleko-pavel-v/leleko-001.html. Los “hornos” a los que hace referencia Leleko probablemente eran subdivisiones del pozo, creadas al colocar bloques de hormigón en intervalos para soportar los rieles de acero. Los “rieles” a los que hace referencia son las tiras de metal largas sobre las que se desplaza un tren (a diferencia de los “durmientes”, las vigas de madera que se colocan de forma perpendicular por debajo de los rieles de acero).

    [4] Yitzhak Arad, Belzec, Sobibor, Treblinka: The Operation Reinhard Death Camps (Indiana University Press, 1987), p. 172, que cita a Sobibor-Bolender, Banda 9, p. 1743.

    [5] Se puede observar el diseño de la parrilla de Treblinka en http://www.deathcamps.org/treblinka/pic/bigl1model32.jpg.

    [6] Se puede observar una imagen de esto en Christopher Bollyn y Helje Kaskel Bollyn, “Estonian Patriot was Eyewitness to Firebombing of Dresden, Nuremberg Trials: The Historical Life of August Kuklane (1923-2006)” en http://www.iamthewitness.com/Bollyn/Eyewitness.to.Firebombing.of.Dresden.pdf.

    [7] David Irving, Apocalypse 1945: The Destruction of Dresden (Focal Point Press, 2007), pp. 234, 235. Se puede acceder a este fragmento en http://fpp.co.uk/books/Dresden/Apocalypse_2007.pdf.

    [8] Frederick Taylor, Dresden: Tuesday, February 13, 1945 (Perennial, 2005), pp. 350, 351.